El agua de coco verde es una bebida refrescante y es posible que muchos de vosotros la consumáis, precisamente, por esa razón. Y, quizá, algunos seáis deportistas y la toméis al hacer ejercicio porque sabéis que es isotónica, energética y ayuda a mantener el cuerpo hidratado.
Sin embargo, el agua de coco es mucho más ya que nos aporta casi todos los nutrientes esenciales que necesita el cuerpo y sus propiedades influyen muy positivamente en nuestra salud.
Se caracteriza, principalmente, por tener gran cantidad de potasio, considerado como el mejor electrolítico para el cuerpo lo que facilita una mejor expulsión de toxinas de manera natural.
Además de ser antioxidante y rica en vitamina A, C, E y muchas de las del grupo B, el agua de coco es buena para eliminar el exceso de alcohol del organismo, alivia las flatulencias y la tensión en el páncreas, aumenta la calidad y cantidad del semen, ayuda en problemas con la vesícula y es un buen diurético.
Otro dato: tiene muchos de los compuestos presentes en la leche materna y se utiliza como su sustituto en la lactancia. ¿Sabíais que en Hawaii las madres que no pueden amamantar a sus hijos lo hacen con agua de coco en vez de con leche de animales?
Estos son solo algunos ejemplos, ya que esta agua tiene muchos más efectos positivos… pero eso ya lo seguiremos contando en otro post.